domingo, 7 de noviembre de 2010

Los Moteros de Montán

Como ya anticipé en otra entrada, en el pueblo, Montán, se formó hará unos tres años un grupo de moteros  bastante heterogéneo. Al menos llevan 3 años montando un viaje de fin de semana a Andorra, a parte de hacer sus salidas para almorzar o comer. Lo típico. Al saber que a principios de junio me había comprado la moto, algunos de ellos me animaban a ir al viaje de este año a Andorra. Yo, que me veía muy verde, decliné la invitación, retrasándolo, si se daba el caso, para el año siguiente. Ahí quedó la cosa y a finales de junio hicieron su viaje.

MONTÁN-ADEMUZ


Ya en agosto, con mi moto pululando por el pueblo, esperaba que hicieran salidas y mientras esperaba a que coincidieran yo hacía mis rutitas. Un día, por fin, me anuncian una escapada para comer a Sigüenza. Me apunté de inmediato, pues había estado hacía dos años en el parador y me encantó la ciudad. Prometía una buena ruta. Estaba prevista para el día 14, sábado. Conforme se acercaba la fecha, las previsiones meteorológicas no eran muy buenas, y hasta se pensó en anular el viaje, pero finalmente salió adelante, pero con cambio de destino. Iríamos a Ademuz. En caso de que se desatara la tormenta estábamos más cerca de casa.
La noche anterior, nervios, preparativos, era mi primera ruta larga en grupo. Un total de 265 kms ida y vuelta.
Me levanté temprano, a las 7:00, no quería llegar tarde el primer día. Como yo me compongo en 10 minutos a las 7:15 ya estaba yo en el balcón dejando pasar el tiempo. No habíamos quedado hasta las 8:00. Entonces vi pasar la primera moto. La Honda Silverwings 600 de Manolo, el de Badalona. Toda la vida con motarras del copón y ahora se veía en un scooter. Este pájaro ha llegado a competir en Enduro. Motero de toda la vida. Lo conozco desde que éramos pequeños y desde que tuvo edad de llevar moto, encima de una lo he visto.
Al verlo pasar, cojo los bártulos y me voy a por la moto, para bajar al "concreta", lugar de concentración, bar el Nuevo Acceso (algún día me explicarán por qué le llaman el "concreta", aunque me lo imagino). Llego al bar y solo estaba Manolo. Cortadito de rigor mientras esperamos. Y van apareciendo poco a poco. A día de hoy, no sabría decir cuantos componen el grupo, pues a aquella salida no venían todos. Conozco a la mayoría, no obstante llevo en Montán 41 años, pero alguno hay que, o no lo había visto nunca, por ser nuevo o por no haber hablado nunca con él. El grupo en sí, como he dicho antes es heterogéneo, tanto en las motos como en las personas. Las edades oscilan entre los treinta y pocos de Ismael y los sesenta y dos de Alfonso, el abuelo con espíritu joven. Las profesiones, de lo más variopintas. Y de las motos, que decir, 3 trails, 3 customs, dos nakeds y el scooter, y como ya os imaginaréis, el blanco de todas las pullas. Pero luego, píllalo bajando un puerto...
Como decía, fueron llegando todos, poco a poco. Alfonso, con su Suzuki GS500. Además tiene una Jawa en el garaje. Manolo, el "pitu", con su Kawa Z750, apodado en el grupo motero "el llaves". Al parecer, cuando se preparan para salir, siempre hay que esperarlo porque no encuentra las llaves. Ismael y su reciente adquisión, una semana después que yo, de su Suzuki Vstrom de 650. El junior del grupo, al menos en esta salida, apodado "el GPS". Nada más salir de Montán, en el primer cruce se pierde. Acaba de montarse la instalación para acoplar un GPS (no es broma, jejeje). El forestal, con su BMW GS 650, apodado, como no podía ser de otra manera "el bosques". Es al que menos conozco. Lo había visto un par de veces por el pueblo, pero no sabía ni quién era. Miguel "el curro", con su triumph y Miguel el de la Kawa Vulcan 900, apodado "el abuelo". No recuerdo como apodaban a Alfonso, que realmente es el abuelo del grupo, pero aunque no sé la edad de Miguel, no le irá lejos. A este sí lo tenía visto por Montán, pero la diferencia de edad pues no nos ha hecho coincidir. Nunca maginé que este hombre llevara una moto. Y por último, Miguel, el primo del Pitu, con su BMW GS1200, que venía de Paterna.


Así pues, todo dispuesto para la salida. Rumbo a Ademuz. La ida, la haremos por Montanejos, hacia Olba, buscando Rubielos de Mora y para cruzar la A23 hacia Manzanera. Se suponía que pararíamos a almorzar aquí, en Manzanera, pero el bar elegido estaba cerrado, así es que continuamos hasta Torrijas, pero los bares estaban cerrados porque estaban en fiestas... ?????????????? Spain is diferent. Pues nada había que continuar. Al final no recuerdo ni dónde paramos a almorzar, si en Arcos de las Salinas o en Aras de los Olmos, pero por fin pudimos almorzar. Un poquito tarde, pero bueno. La ruta hasta aquí, buena, aunque ya la conocía, por lo menos hasta la Autovía Mudejar. Muy buenas curvas y buen ritmo. Eso sí, la Vulcan y la Silverado, siempre juntas y perdiendo de vista al resto de caballos desbocados. Nosotros a nuestra marcha. Disfrutando. Eso sí, siempre acababan esperándonos si veían que no llegábamos. 
Tras el almuerzo, la subida hasta Ademuz, también muy buena y divertida, aunque con un par de curvas traicioneras un poquito antes de llegar. Me las comí las dos. El novato, jejeje.
Llegamos al Hostal Casa Domingo, restaurante elegido para reponer fuerzas. Aparcamos las motos y como era temprano aún, serían las 13:00 y teniendo en cuenta que habíamos almorzado tarde, nos dispusimos a dar una vuelta por el pueblo. Pintoresco pueblo. En boca de nuestro albañil, "El curro", este pueblo está a medio lucir. Y tenía razón. los tonos marrones destacan. Da la sensación de que las casa están acabadas a puro cemento, sin pintar. 
Dimos una vuelta por sus empinadas calles; por supuesto, perdimos a Alfonso y a Manolo, que fueron a por tabaco y ya cansados de buscarlos, decidimos volver al Hostal. Allí estaban. Alfonso departiendo con unos lugareños. No pierde comba. Es su especialidad.
La comida, abundante y buena. Alguno hasta se asustó al ver los platos. Manolo, el del Scooter, con fama de tener buen saque, con mucho dolor de su corazón, no pudo acabarse el chamón. La excusa: habíamos almorzado muy tarde. La verdad es que había razones para no acabarse el bicho. Era el segundo plato:



Tras la comida y como no se podía fumar en el local, ainssssss lo que nos va a tocar sufrir, hicimos una sentada en la terracita del Hostal. Reposando la comida y descansando tranquilamente. Pero a las 17:00 había que ponerse en marcha, pues algunos teníamos que volver a la cabalgata de disfraces, donde los niños salían disfrazados. "Una cosa es largarse por ahí con las motos con los amigotes y otra perderse a los niños disfrazados, así es que a las 18:00 te quiero aquí!", exclamaban nuestras sufridas parientas...


Recogimos bártulos y nos pusimos en marcha hacia Montán. Como había prisa, decidimos buscar la A-23 en Teruel y bajar directamente a Jérica. El tramo Ademuz-Teruel por la N-330 espectacular. Yo la he bautizado como una recta llena de curvas. Curvas muy suaves, pero constantes, con lo cual te permite llevar una buena velocidad, al tiempo que no paras de zigzagear. Tan solo en tres o cuatro curvas tenías que tocar el freno. Realmente muy entretenida. Lo mejor del viaje.
Una vez en la autovía, abrir gas y hasta Jérica, sin mucho más que contar. Bueno, algo sí. A Ismael (por ahora), le llegó en septiembre, poco antes de las fiestas, un recuerdo de la DGT de nuestro viaje. Recuerdo de la Autovía Mudéjar, nada más salir en Teruel a la A-23. ¡Qué mala suerte tiene!


Hasta el día de hoy, puedo catalogar esta salida como la segunda mejor ruta desde que tengo la moto. Buen paseo, buenas carreteras, buen ambiente y buena comida. Tenía yo mis dudas con el grupo. Por la idiosincrasia de éste, por roces de antaño, en la lejana adolescencia y juventud, con alguno de los miembros, por mi inexperiencia... pero al final la conclusión que sacas es que a pesar de ser diferentes en muchas cosas, al grupo lo une una sola, la pasión por la moto, independientemente del tipo o la cilindrada. Muy buen rollo. Espero poder ir en junio de 2011 al viaje anual, esta vez a Granada, donde supongo que me bautizarán, con mi mote correspondiente.


MONTÁN-PATERNA


Tenía yo esperanzas de poder salir mucho durante el mes de agosto con los Moteros de Montán, pero al final, se redujo a la salida de Ademuz y a una pequeña salida para almorzar en Paterna, en el bar de Miguel, el primo del "Pitu". A esta segunda salida, fuimos menos. Alfonso, Miguel el de la Vulcan, Manolo con su Scooter, el forestal y yo. El "Pitu", que curraba, acudiría allí a la hora del almuerzo. 
Tampoco hay mucho que contar. Salvo el tramo, Montán-Jérica, que es divertido siempre, con su alto de Arenillas, el resto, todo Autovía, la A23 y la A7. Sin mucha historia. Llegamos a Paterna, donde ya se estaban preparando las jaulas para la cordà, y Miguel tuvo que venir a buscarnos, porque no sabíamos llegar al bar. Un almuerzo tranquilito. Bocata, cerveza, bueno Manolo se cascó dos bocatas (he dicho ya que tiene buen saque, verdad) y de vuelta a casa para la comida.
Poco misterio. Tan solo una anécdota. Subiendo nos adelantó una Harley que iba a buen ritmo. El Scooter de Manolo que lo ve pasar se mete detrás, a por él. Y le siguen Alfonso y el forestal. Por supuesto, La Vulcan y la Silverado, relajaditas, a su ritmo. Son unos picaos, jajaja. Total para luego decir... "Bah, cuando se ha puesto a 160, lo hemos dejado..." Al final lo picaron. Y eso que el chaval había saludado uno a uno a todos, mientras nos adelantaba. Si es que a estos no se les puede ni guiñar el ojo...

Como resumen de mi experiencia con este grupo, muy buena, pero escasa. Supongo que será por mis ansias por coger la moto y hacer kms. Pero bueno, me ha servido para meterme un poco con ellos y llamarles moterillos de pacotilla, que no ruedan na de na. Sobre todo, el punto culminante de mis pullas fue la programada salida a Montalbán a finales de agosto, a la que sólo se apuntó Alfonso. Pero esa será otra historia.

5 comentarios:

  1. Este tu blog promete tio! Compartir las experiencias rodando en moto es todo un ejercicio de generosidad con todos nosotros y también, todo hay que decirlo, el descubrimiento de nuevos caminos por esta nuestra España...

    Un abrazo.

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  2. Mira pues quien habló. Ya me gustaría a mi llegar a contar las aventuras que tu nos cuentas. La envidia me corroe. Pero poco a poco, sin prisas...

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  3. Que sepas, Artus, que te estoy leyendo desde ayer y que te has convertido en mi heroe... XD!!! La verdad es que me siento bastante identificado contigo en tus comienzos (yo acabo de sacarme el A2 tambien de forma ¿tardia?). Ademas, tus vivencias son cuanto menos entretenidas a la vez que, algunas de ellas, educativas en cuanto al mundo custom y motero en general se refiere. A ver si algun dia llego a conocerte...
    Un saludo desde Gipuzkoa.

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    1. Para mi será un placer, David, y si paso por Gipuzkoa quizás nos crucemos por alguna carretera perdida... Con lo abandonadito que tengo yo estooo...

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    2. hecho!!! Si algun dia vienes por aqui estas invitado por lo menos a unas birras, y si vienes con tiempo, nos vamos de sidreria a por un buen txuleton!!!

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