Ancha es Castilla, Parte 1

Llevaba mucho tiempo preparando este viaje. Nuestro aniversario (17 ya, y parece que fue ayer). Todos los años nos vamos a un parador y el año pasado fue la primera vez que nos fuimos con la moto al parador de Alcañiz. Este año he preparado algo más largo. La verdad es que los paradores cercanos se nos han acabado y hay que ir pensando en coger carretera. Y claro 700 kms no los puedes hacer un día para volverte al siguiente como hemos hecho hasta ahora. Así es que preparé un viajecito de 5 días por Castilla-León. El objetivo era el parador de Benavente, en Zamora. Y de paso ir visitando cositas por el camino. Ir acercándonos poco a poco y no hacer el viaje del tirón. A disfrutar de la moto y la carretera. Y ciertamente lo hemos gozado.

1159 millas, es decir 1865 kms. Ahí es nada. Pero vamos por partes, que hay mucha miga que cortar.

Primera etapa: Puerto de Sagunto - Pradilla (Guadalajara) - 226 kms

En un primer momento estaba previsto alargar esta primera etapa hasta San Esteban de Gormaz, Soria, más o menos a mitad de camino, pero pensamos en visitar a unos familiares que pasan el verano en esta aldea de Guadalajara, próxima a Molina de Aragón. Por tanto la primera etapa quedó corta y la siguiente muy larga. Pero me doy por satisfecho, pues le di una gran alegría a mi tía.

La previsión meteorológica de los 5 días era buena, inmejorable. Pero el jueves 21 empezó a torcerse la previsión, pues anunciaba lluvias para el 22, día de partida, en la zona de Teruel, justo a la hora por la que debíamos pasar por allí. A partir de ahí, se anunciaba sol y más sol. Metimos los trajes de agua en una mochila con la intención de dejarlos en Pradilla. Cargamos la moto y a las 17:00h nos poníamos en marcha. Depósito lleno y contador parcial a 0:

El cielo muy gris, amenazando lluvia y nada más salir y coger la A23, autovía Mudéjar, comienza a llover. Pero pasa pronto la nube y aunque sigue bastante encapotado deja de caer agua. Cada vez está más negro y decido parar para ponernos los trajes de agua. Mano de santo, oyes. No cayó ya ni una gota ni media. Ni por Teruel. En 2:40h nos plantamos en Pradilla. La ruta sin novedad. A-23 hasta Monreal del Campo, para coger la N211 en dirección a Molina de Aragón y 16kms antes buscamos la GU965, apenas un camino ancho y asfaltado.
El pueblo desierto. No se ve un alma. Normal, en invierno viven 3 personas y aunque ya estamos en julio todavía no han llegado los veraneantes.

Llegamos a destino y guardamos la moto. Nuestro primer alojamiento. Este salió barato, jejeje y la cena también.

Detrás de la casa, se ve la pequeña iglesia en proceso de rehabilitación, dominando desde el cerro la pequeña población

Aprovechamos para dar una vuelta por los alrededores del pueblo. Tampoco es que se pueda hacer mucho más. Por no haber, no hay ni bar. Bueno, hay algo parecido. La antigua escuela la han transformado en bar, aunque no es estrictamente un bar. Cada semana del verano le toca a una familia encargarse del "bar". Jejeje. Es curioso. Total, que salimos a andar:

Yo voy soñando caminos
de la tarde. ¡Las colinas
doradas, los verdes pinos,
las polvorientas encinas!...
¿Adonde el camino irá?
Yo voy cantando, viajero
a lo largo del sendero...
-La tarde cayendo está-,
"En el corazón tenía
la espina de una pasión;
logré arrancármela un día:
ya no siento el corazón."

Y todo el campo un momento
se queda, mudo y sombrío,
meditando. Suena el viento
en los álamos del río.

La tarde más se oscurece;
y el camino que serpea
y débilmente blanquea,
se enturbia y desaparece.

Mi cantar vuelve a plañir:
"Aguda espina dorada,
quién te pudiera sentir
en el corazón clavada."

Antonio Machado

(Perdonadme la licencia, pero a pesar de no estar en Soria, el paiseaje que me rodeaba y que captó mi cámara era totalmente machadiano. Juzgad vosotros mismos.)

Caminante, son tus huellas
el camino y nada más;
Caminante, no hay camino,
se hace camino al andar.
Al andar se hace el camino,
y al volver la vista atrás
se ve la senda que nunca
se ha de volver a pisar.
Caminante no hay camino
sino estelas en la mar.

Hacia un ocaso radiante 
caminaba el sol de estío,
y era, entre nubes de fuego, una trompeta gigante, 
tras de los álamos verdes de las márgenes del río. 

Dentro de un olmo sonaba la sempiterna tijera 
de la cigarra cantora, el monorritmo jovial, 
entre metal y madera, 
que es la canción estival.  

En una huerta sombría 
giraban los cangilones de la noria soñolienta. 
Bajo las ramas obscuras el son del agua se oía. 
Era una tarde de julio, luminosa y polvorienta. 

  Yo iba haciendo mi camino, 
absorto en el solitario crepúsculo campesino. 

Y pensaba: "¡Hermosa tarde, nota de la lira inmensa 
toda desdén y armonía; 
hermosa tarde, tú curas la pobre melancolía 
de este rincón vanidoso, obscuro rincón que piensa!" [...]

Tras la caída del sol tocaba volver a casa a por la cena y el reposo, pues al día siguiente nos esperaba un buen tute. Volviendo a la aldea todavía tuve tiempo de volver a fotografiar la pequeña iglesia.

Después de cenar, el cigarrito de rigor a la puerta que da a una pequeña plaza sin asfaltar. Mi tío está que trina, pues es la única calle que queda por asfaltar. La soledad más absoluta, tranquilidad y un silencio solo roto por el murmullo de las hojas de los chopos que tenemos enfrente de la casa.
No dio el día para más, así es que a la cama que mañana había que madrugar.

La matinal de Torrent 2011

Ya estuve en la del año pasado y me lo pasé en grande. Era mi segunda Matinal y la verdad es que estuvo muy divertida. A partir de ahí, comenzó mi desánimo y poco a poco fui alejándome de ellas. Sigo asistiendo a alguna, pero siempre con la vista puesta en ruta posterior, sin quedarme mucho tiempo. Pero la de Torrent la recordaba con cariño.

Este año de nuevo asistirían los compañeros de Dracs de la Llum, del foro Espíritu Custom, con los que ya fui el año pasado. Además la cita era en la Pantera Rosa de Valencia. ¡Cuánto tiempo sin reunirme allí con la gente! Y allí me presenté a las 9:15 de la mañana del domingo 17 de julio.
Estaban casi todos. Algunos conocidos y otros nuevos. Es lo bueno de estos eventos, siempre encuentras gente nueva en esto de rodar con la moto. No conté las motos, pero seríamos enre 20 y 22 motos, con lo que no está nada mal. Faltó Bicipalo... Le hubiese gustado ver la Pink Panther como en los viejos tiempos. Pero sí estaban Moset, Danybiker, Zefran, Chiwi y María, Corso, Mathius, Aguila, Jack, Uxul y otro puñado de los que desconozco el nombre... En fin un buen dragón que salió.

El trayecto a Torrent por el río es corto y llegamos enseguida. Chupito de cazalla de bienvenida, que yo, prudentemente me salté, pues andaba algo perjudicado de la noche anterior... Encontramos sitio a la sombra y aparcamos las motos...

A partir de aquí, lo típico de cualquier matinal. Acercarte al recinto, sacar los tickets del almuerzo y la bebida, te dan la bolsa con la camiseta de rigor... Este año la perdí enseguida, o algún amigo de lo ajeno la "encontró"... en fin, más se perdió en Cuba, que decía mi abuelo. 

El siguiente paso, almorzar. Éramos muchos y a esas horas era difícil encontrar mesa tan larga. Bueno había una:

La única mesa de todo el recinto donde cascaba un sol de narices. Había muchísima gente. La verdad es que no sé por qué tiene tanto éxito esta matinal...

La música dando ambiente y los aspersores suspendidos en el aire echando agua sin parar hacían más soportable el calor de la mañana. Andaban por allí Los Perros Negros. Los cacé:

 Al que no pude saludar es al Perro Negro, pues este hombre es un no parar, cámara en mano y libreta en la otra. Lo fotografía todo para luego hacer un reportaje en su blog. Ya habrá otra ocasión de saludarlo. No se pierde una, jejeje.
A las 11:30 dieron la orden de salida para la ruta barítima y allá que nos fuimos. Rule por las calles de Torrent en dirección a un restaurante donde ofrecían cerveza a quien quisiese y/o pudiese...

El año pasado el Indio se metió en la fuente de los chorros. Este año llevaba el mismo camino, pero alguien se le adelantó y se llevó una bronca del 7, así es que el Indio se retiró estratégicamente, jejeje.
Una cosa que no entiendo de estos eventos. Solo dan cerveza. No digo yo que se pongan a servir cualquier refresco que se nos antoje a cada uno, pero un simple botellín de agua... Pues no hay manera. ¡Qué dura es la vida motera!
De vuelta al recinto, continúa la fiesta. Más música, más agua y la novedad de este año: Un cañón de espuma.

Ambiente estupendo. Y otra sorpresa. Hicieron acto de aparición los Murcianos: Torres, Xoxe, Andresico, Manazas y Enrien, que no son de Murcia, pero están más cerca de ellos que de los valencianos. Solo un punto negativo a esta sorpresa... Vinieron en ¡lata! jejeje. Un abrazo compañeros.


Seguimos la fiesta hasta las 13:00h

 

 Vale, vale, ya me quito... ¡Oig cómo sois!

Decía yo, que no sabía por qué tenía tanto éxito esta matinal...

¡Ah, sí.! Debe ser porque te lavan la moto con espuma y jabón, porque algunas pobres no ven el agua en todo el año...

Bueno, ahora en serio. Si esta matinal tiene éxito es porque tiene este punto picante de las chicas, pero no solo eso. Los aspersores invitan a saltar debajo de ellos al compás de la música y todo el conjunto la convierte en una matinal festiva y activa. En las otras a las que he asistido te limitas a almorzar, pasear entre los tenderetes y poco más...

Y a las 13:00h de vuelta a casa. Y para próximas entregas, ando preparando la salida del aniversario. Este año son 4-5 días según se de. Así es que amenazo con seguir atormentandoos en breve con una ruta que ando preparando por tierras castellanas. 
Hasta pronto.

Escapada por la Sierra de Espadán

Tras pasar el primer fin de semana de julio en Sevilla con la familia y alejado de la moto, necesitaba sacarla a pasear. Una escapadita aunque fuera corta. Miré por los distintos foros a ver que opciones había para el domingo 10 de julio y no eran muy sugerentes.

Había una matinal en Canet, organizada por un bar del Puerto. 3kms... Tenía que ser corta, pero necesitaba algo más... La otra opción era una matinal en La Vall d' Uixó, de la que me enteré de refilón a través del blog de El Perro Negro. Intenté ver quien la organizaba y de qué iba, pero no había ni una información... Mala señal. Pero bueno, si El Perro Negro decía que había una matinal en la Vall...
Decidido, me daré una vuelta por la de Canet y luego por la de la Vall, para terminar enfilando hacia la Sierra de Espadán a donde me lleve el viento y la rueda delantera.

Me levanto a las 9:00h y salgo hacia Canet... Ni rastro de motos, ni señalización de dónde tiene lugar el evento... Tampoco hago más indagaciones y continúo hacia la Vall d' Uixó. Aquí sí encuentro señalización y ésta me lleva al lugar de la matinal, en una especie de polígono comercial-industrial.

Pocas motos, poco ambiente. El panorama desolador. Qué poco voy a durar aquí. Había pocas motos cuando llegué y a partir de ahí, se iban más que venían. Al parecer no era del agrado de los asistentes. Daba un poco de yuyu ver cómo desaparecía la gente, sobre todo me sabía mal por los organizadores, que son quienes se lo curran. Pero bueno, ya lo he dicho en varias ocasiones. Demasiados eventos de este tipo. La gente cada vez es más exigente y lo entiendo. Los organizadores de eventos como estos deberán ponerse las pilas si quieren tener asistentes y además mantenerlos. La verdad, era la primera vez que veía cómo se iba la gente antes de iniciar la ruta, que según anunciaba el animador iría hasta la vecina población de Alfondeguilla.

No iba a almorzar, pero sí a tomarme un cortadito. En la puerta del pub, abierto para la ocasión, me encuentro con Perseo, del Komando Saguntum, que había venido a darse una vuelta y se iba ya. "Sí, me voy a subir por Alfondeguilla hasta Jérica..." Otra vez Alfondeguilla. Pues nada cuando me tome el cortadito, para Alfondeguilla que me voy. Estuve un rato más viendo el devenir del evento y puse rumbo a Alfondeguilla.

La rutilla resultó de lo más entretenida, una carretera de montaña, sinuosa que te introduce de lleno en la Sierra de Espadán. A partir de ahí solo había que dejarse llevar. A ver hasta dónde llegaba por ahí. El calor apretaba, pero el aericillo de la sierra mitigaba su intensidad mientras te mantuvieras en movimiento, hasta que la carretera me hizo el guiño gracioso de la mañana...

Me entró la risa floja.

Y justo tras la curva que se ve al fondo la otra sorpresa de la mañana

 Visto desde la carretera antes de entrar en Azuébar

Y una vez sales de Azuébar por el otro lado.

El Castillo de Azuébar es de orígen musulman, del s. XII y se encuentra en ruinas. Concretamente en ruina progresiva. Es decir, un monumento más que se irá al carajo sin que nadie haga nada por evitarlo. Por lo que he deducido es lo que significa lo de Ruina Progresiva. Desde abajo, parece que quedan bastantes lienzos de muralla en pie, gran parte de la torre del homenaje y restos de otras torres.

Seguimos ruta por la mentada carreterilla, concretamente la CV230 hasta aproximarnos al término municipal de Soneja, donde todavía se aprecian los resultados del devastador incendio del año 2009 que obligó a cortar la Autovía Mudéjar.

Entre las excavadoras y las cerillas estamos dejando el monte hecho unos zorros.

En fin. Continuamos ruta y llegamos a una bifurcación. Estamos en la CV200. A la derecha Almedíjar, a la izquierda Castellnovo. No hay duda ¿no? Solo por el nombre ya atrae. Además me sonaba que había castillo, pues me pareció verlo de pasada cuando subí a Gaibiel con el Komando Saguntum. Y efectivamente allí estaba, situado en un cerro en lo alto de la población. 

 

Como está dentro de la población, sí podré acercarme. Una vez más, me veía haciendo cabriolas por entre callejuelas estrechas y empinadas. Es un sinvivir. Enfilar una cuesta arriba sin saber que te deparará la siguiente curva. Así es que decido aparcar la moto en el primer llano que encuentro a los pies del castillo y sigo a pie. Luego descubres que podías haber subido un par de cuestas más con sus curvas de infarto, pero, vaya, para que arriesgar, jajaja.

El castillo de Castellnovo es de origen romano, pues formaba parte de la red defensiva de la vecina Segorbe, antigua Segóbriga (sí ya sé, hay varias Segóbrigas repartidas por España, pero esta es una de ellas). Fue posteriormente reconstruido por los musulmanes y muy modificado en el s. XV, dotándolo del aspecto renacentista que atesora en estos momentos, siempre claro dentro de su estado de Ruina Progresiva. Aunque al parecer se están realizando trabajos, por lo que estaba cerrado al público. Algo es algo.

Al llegar más tarde a casa me quedé con la incertidumbre de lo que me había perdido en Almedíjar y busqué. También había castillo, en este caso de origen islámico. El Castillo de la Rodana y Castillet. Ya tengo otra excusa para volver por la sierra de Espadán. Esta es nuestra España: dos poblaciones a unos 5 kms de distancia, Castellnovo de nombre cristiano y Almedíjar, de topónimo árabe. ¡Qué apasionante es nuestra historia! Y los niños aprendiendo Conocimiento del Medio en las escuelas. ¿El medio de qué? ¿de quemarlo?

Las 11:30 de la mañana y daba por terminada la salidita. Hoy llegaba pronto a casa. Llegué hasta Segorbe y de allí por la vía de servicio hasta casa. Eso sí con paradita en Estivella a visitar a mi primo, que hacía tiempo que no veía. Unas cervecitas, cacaos, un plato de jamón (no había almorzado, jejeje) y a comer a casa.

Y hasta la matinal de Torrent, que ha sido este mismo domingo.

Por cierto, aprovecho para agradecer a mis fieles seguidores el haber llegado a las 10.000 visitas. Ni por asomo esperaba yo esto. Y no es falsa modestia. Eso sí, esto me anima a seguir por el camino marcado.
Gracias a todos.