Qué bien sonaba eso de Virago 500. Así es que por ahi empecé la búqueda. Empecé a rastrear la red y me di cuenta de que me había hecho mayor. La Virago 500 era ya una moto viejecita y auque estaban bien de precio, tenían muchos kms y muchos años. A partir de ahí empecé a buscar alternativas más modernas. Ahí comenzaron a surgir, la Yamaha XVS 650 DragStar (La hermana mas moderna, aunque ya descatalogada, de mi antiguo sueño),
las Hondas Shadow 750 en todas sus versiones,
las Kawasakis Vulcan 800
las Intruder 800. Una locura. Los precios aumentaban, pero eran mas modernas, tenían menos kms y menos años. Empecé a buscar anuncios de particulares, pero muchos de ellos eran antiguos y ya hacía tiempo que vendieron la moto. Empecé a pensar que no iba a ser tan fácil encontrar montura. Mis dos principales opciones eran La Drag Star y la Shadow, por aquello de que no había que limitarlas con el nuevo carnet. Dirigí mi punto de mira a tiendas de motos de ocasión, por aquello de que te da más confianza. Eran más caras, pero estaban en mejor estado, al menos aparentemente. Pero Customs había pocas y no me convencía ninguna. Encontré una Drag Star negra en Valencia y me fui a verla. 4500€ pero tenía que pasar la revisión, yo, arreglar los tubos de escapes rozados, cambiar las maletas... En fin que a lo tonto a lo tonto se me iba a los 6500€. Como no tenía aun el carnet, me limité a subirme y a probar sensaciones. La verdad es que la moto me encantó. Lo que no me gustó fue el sonido... pero qué quieres.... es una japonesa... Mi límite para segunda mano estaba entre 4000 y 5000€ en función de años, kms y equipamiento. Y se me escapaban todos los presupuestos a mas de 6000€. Nuevo cambio de chip y me voy a por una nueva. Total para gastarme 6000 y pico en algo de segunda mano y equiparlo, prefería estrenar. Me monté en las nuevas Shadow 750,
la Vulcan 900
y la Intruder c800.
Realmente me gustaban todas, pero siempre había algo que no me dejaba decidirme. En la shadow el depósito, en la Kawa los escapes, demasiado cerca de la pierna, y la Intruder el precio. Equipada con lo que yo quería se me ponía en cerca de 9000€. Demasiado para empezar. Demasiado para un novato. Así es que volví otra vez a las de segunda mano, sin prisas, aunque el carnet estaba al caer. Di con un par de webs de ocasion: Motissimo en Barcelona e Intruder en Murcia. Esta última me abrió los ojos. ¿Por qué no una Harley que es realmente lo que yo quiero? (aunque no para empezar). La verdad es que viendo los precios para gastarme 6500€ prefería comprarme una HD. Lo malo es que por ese precio solo estaba la Sporter y había que limitarla. Además, es la única HD que no me gusta. En cualquier caso mirando la web de intruder, revisando Harleys y precios, encontré una Heritage Softail Classic por 5000€. Había dos muy parecidas, una que valía 15000€ y la de 5000€. Ahí había gato encerrado. Me fijo bien y encontré el fallo, la de 5000€ no era una HD sino una Yamaha VStar 650 Silverado.
Blanca, preciosa, equipadísima, con alforjas, pantalla, parrilla, plataformas delanteras, asiento Mustang claveteado como las alforjas y el respaldo... En fin que me enamoré y me dije, esa es mi moto. Recuerdo que fue un viernes, 4 de junio y sin pensarlo dos veces, el lunes siguiente, 7 de junio cogí el coche y me fui a Murcia a verla. Llevaba otras alternativas por si me fallaba la VStar, hasta 5 folios con 4 ó 5 motos por folio. Una cosa era segura, de allí salía con moto.
Nada más entrar en la tienda empecé a alucinar, tanto cromado, tanta Harley, tanta Custom en definitiva. Con la de vueltas que había dado yo buscando moto. Y estaban todas aquí. Todas las motos llevaban una funda de plástico con un folio con las características de la moto y su precio. Buscaba ansioso la VStar blanca y no la veía. No veía vendedores que me pudieran ayudar, hasta que por fin la encontré y el corazón me dio un vuelco. La funda de plástico estaba vacía... ¡Maldita sea mi suerte! Solo podía significar o que estaba reservada o peor, vendida. Busqué a un vendedor hecho un manojo de nervios y a la menor ocasión le pregunté: ¿Ésta por qué no tiene folio? Y me contestó lo que yo ya me temía: Pues puede ser por dos cosas, o porque la han reservado o porque ya está vendida. Se me cayó el alma a los pies. La tenía allí al lado y era preciosa. Era mi moto. El vendedor se apiadó de mí y me dijo, espera y te lo confirmo. Así es que desapareció en las oficinas y allí me dejó con la incertidumbre. Empecé a ver otras motos que había cerca, pero los ojos se me iban una y otra vez a la preciosidad blanca. Entonces vi venir al vendedor con un folio en la mano. Has tenido suerte, me dijo. Estaba fuera el folio porque un cliente estaba dudando en llevarse esta blanca o una roja y se decidió por la roja... Iba a colocar el folio en la funda y lo paré, no no, no hace falta. Te doy la señal y me la guardas. cuando la matriculeis vengo a por ella. Y así quedamos, pagué la señal y ya era míaaaaaaaaaaa. Mi tesoroooooooooooo, jejeje. Me monté por última vez y dejé la tienda como un niño con zapatos nuevos. Sólo había que esperar. Estaría matriculada el jueves o el viernes, porque habia fiesta en Murcia. No importa, no importa, todavía no me han dado ni el provisional. ¡Qué semana más larga me esperaba! Me tenían que dar el carnet provisional y me lo dieron esa misma tarde. Ya podría traerme la blanca en cuanto estuviera matriculada.
Joder tio esta predestinada a ti. Parece que fue la montura la que eligió al jienete.
ResponderEliminarSiempre se ha dicho, que la montura te elige a ti y estoy seguro de que esta me eligió...
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